La lona utilizada en nuestros productos es un tejido que resiste, dura y tiene personalidades únicas.

Aunque para mantener tal material, es necesario una guía de mantenimiento. ¡Para eso estamos acá! Te vamos a mostrar el paso a paso de cómo cuidar la lona de tus productos Guanaco.

Limpieza regular

1. Revisar y reparar

Primero de la limpieza, se debe revisar costuras, cierres, manchas u otros factores para solucionarlos previamente.

2. Sacudir y cepillar

Con una sacudida y pasando un cepillo podemos quitar el exceso de tierra o factores externos. Recordá que el cepillo debe ser de cerdas suaves para evitar dañar las telas.

3. El paño húmedo

Para manchas leves o suciedad que no quite el cepillo, es recomendable utilizar un trapito húmedo. Podés agregarle pocas gotas de detergente y aplicar de manera circular para no dañar la textura de la lona. 

Lavado a mano

Con esta opción tenés mayor control sobre cómo se está lavando la tela y garantizas que no se deforme ni pierda color.

1. Preparando la solución de limpieza

Asegurate que el recipiente donde laves, la mochila pueda sumergirse entera. Luego con agua tibia y un detergente suave la dejás en remojo para aflojar la suciedad adherida.

2. Limpieza a fondo

Con un cepillo de cerdas suaves y movimientos circulares aplicas todo el enjabonado sobre manchas o superficies a fin de quitar la suciedad.

3. Enjuague en detalle

Al finalizar el proceso de limpiado, podés enjuagar la mochila con agua limpia para quitar todo excedente de detergente ya que este producto se adhiere fácilmente a la lona, esto puede provocar rigidez de la tela o decoloración.

Lavado en máquina

Si bien no es una opción que recomendamos, muchos usuarios eligen esta opción por su comodidad. Podemos aconsejarte sobre usos prácticos para cuidar la mochila durante el ciclo de lavado.

• Utiliza un ciclo de lavado delicado para evitar giros bruscos.
• La bolsa de lavado es similar a una red para proteger el material y evitar daños.
• Agua fría o tibia para mantener la forma de la mochila y evitar que esta se enoja.
• Optar por secado natural ya que la secadora y el calor excesivo que produce podría deformar la lona.

Consejos que pueden ayudar

Después de la limpieza exhaustiva de tu mochila, te dejamos algunos consejos para evitar deformaciones, pérdidas de color o roturas:

• No exponer al sol directo: esto puede decolorarla y debilitar la fibra.
• Evitar la humedad excesiva: ideal guardarla en un lugar fresco y seco, ya que puede aparecer moho o malos olores.
• Evita sobrecargar: aunque la lona es una tela resistente, cargarla podría forzar las costuras.
• Cuidado con los objetos afilados: protegelos o colocalos en compartimentos internos para evitar dañar la tela.

Mantener tu mochila limpia y sana puede significar una mochila que dure varios años. Las mochilas Guanaco están hechas para resistir y ensuciarse sin dañar la tela, sin embargo frente a un tiempo necesitan de sus cuidados.

Ante cualquier consulta sobre nuestras mochilas o materiales, podés comunicarte con nosotros ¡Estaremos felices de ayudarte!